Desde el año 2000 IMPACTO colabora con distintas asociaciones en su labor hacía los más desfavorecidos, como parte del compromiso común de un mundo mejor para todos.

Esta colaboración se centra principalmente en dos organizaciones:

  • Hermanas Misioneras de Malawi (Misioneras de María Mediadora)
  • Fundación Vicente Ferrer

Congregación misionera: HERMANAS DE MARÍA MEDIADORA

LA CASA DE AMAI MARÍA

Internado de niñas y jóvenes huérfanas que cursan estudios de secundaria en la ciudad de Lilongwe.

Casa de formación para futuras misioneras Malawianas.

Biblioteca abierta a estudiantes y gente de la zona, taller de costura y cursos de ordenador.

Actualmente viven y dependen en su totalidad del internado: 70 niñas.

En él viven, estudian y se forman niñas huérfanas, sin recursos y el objetivo es que terminen sus estudios de secundaria y tengan acceso a la universidad.

Además de las clases escolares, alimentación, formación y biblioteca, cuentan con clases de costura e informática y todo el apoyo emocional que les dan las Hermanas Misioneras.

Fundación Vicente Ferrer

Impacto apadrina un niño por cada empleado. Esto implica tener un vínculo directo con la India rural y seguir la evolución de los niños mediante sus cartas, dibujos y fotografías.

Estamos garantizando el acceso a estos niños a la educación, a la sanidad y a una vivienda digna. Además de mejorar las condiciones de vida de su familia y su comunidad.

Hermanas Misioneras de María Mediadora

Hermanas Misioneras de María Mediadora fundada en 1942, dedica su trabajo y esfuerzo a mejorar las condiciones de vida de los más desfavorecidos entre los pobres: Niños y Ancianos. Su labor con las poblaciones más desfavorecidas se centra en dos aspectos fundamentales: la mejora de las condiciones de vida a través de la atención socio-sanitaria y la educación, cimiento de un futuro mejor para las siguientes generaciones.

A lo largo de los años la labor de las Misioneras de María Mediadora se ha extendido por todo el mundo, hasta abarcar a día de hoy tres de los cinco continentes. Asia, África y América Latina acogen misiones de las Hermanas quienes con su trabajo y dedicación contribuyen a paliar los estragos de la pobreza en algunos de los lugares más olvidados del planeta como Malawi, Colombia, Honduras e India.

COMUNIDAD DE CHEZI (Orfanato)

  • Personal en plantilla: 75 (Profesores, educadores, cuidadores, cocina…etc.)
  • Niños huérfanos: 120
  • Programa “Rain Bow” para niños huérfanos: 850 chicos
  • Proyecto de ancianos Sun Rise

Este hogar que acoge a tantos niños huérfanos, se compone de: dispensario, centro de nutrición, cocina, huertas, casas de los niños, escuelas para niños pequeños, 1.º- 2.º- 3º de infantiles. Todo está perfectamente atendido. Los niños han ganado en cuidado, sobre todo al estar supervisados y controlados en sus comidas y educación. Están muy felices. Sigue existiendo un vacío grande, para conocer a fondo los problemas psicológicos que la mayoría tienen, desde que nacen, y que van saliendo poco a poco, a medida que van entrando en la adolescencia.

Los voluntarios están colaborando todo lo que pueden en los proyectos de la misión; en la farmacia del centro, clases de ordenador a los niños, en la biblioteca, en la escuela San Matías. La biblioteca ha cambiado por completo la forma de ser de los niños y jóvenes de la zona; y viene a la memoria el año 1992, cuando vio la luz este ambicioso proyecto, cientos de niños deambulaban por allí en busca de saltamontes, ratas y cosas para comer; no existía el concepto de escuela, y menos de lectura. Las hermanas misioneras comenzaron invitando a los niños, debajo de los árboles, con un palito en la mano para que aprendieran a escribir en la tierra, y hoy 19 años después, tienen una hermosa escuela, acceso a educación, nutrición, escolarización, sanidad y futuro…..se hizo un largo y fructífero camino.